NUEVA RUTA EN EL KARAKORUM
Aportar nuevas rutas a la comunidad de
escaladores lo es todo para mi, ya sea abriendo nuevos boulders, rutas de
deportiva o grandes paredes en los lugares más remotos del mundo. En esta
última expedición a Pakistán, no solo tuvimos la posibilidad de establecer FreeTanga Ecuatoriana (680m, 16 largos 7b+, A1+), si no también de escalar Eternal Flame en la Torre sin Nombre, gran parte de Parallel
World y la ruta Americana en la Grate
Trango y finalmente la Pequeña Trango
por una ruta desconocida pero muy estética. Escalar las tres Trango fue sin lugar a duda una de las
mejores experiencias de mi vida. Nunca me imaginé que esto iba a pasar pero
gracias al clima y a mi compañero de cordada, Felipe Guarderas, logramos eso y
mucho más.
Hace un año cuando empezamos a trabajar
en este proyecto, todo fue muy complicado. Más que la preparación física o
técnica, los problemas surgieron con el financiamiento. Un mes antes de nuestra
partida, no íbamos a ningún lado. Los patrocinadores no salían y teníamos como máximo
para llegar a Perú, y en bus…! Sin embargo, las cosas se fueron dando, la
suerte se puso de nuestro lado y nos encaminamos rumbo a la cordillera del Karakorum con el objetivo de escalar
alguna torre y sobre todo pasarlo bien.
Todo es mucho más complejo de lo que uno
se imagina cuando se comienza a preparar una expedición de este tipo. La parte
logística se mueve muy lenta y pueden surgir varias dificultades, además de los
problemas políticos en los que se encuentra el país actualmente y, que
obviamente, es un riesgo más que asumir. Después de 12 días de viaje entre
aviones, carreteras desastrosas y largas jornadas de acercamiento, finalmente establecimos
nuestro campamento base a los pies de las inmensas paredes de las Torres del Trango.
Uno de nuestros objetivos era escalar la
ruta Parallel World de la Gran Trango. Después de dos días de
progresión, al llegar al largo 33 y 2000 metros de altura, decidimos bajar y
cambiar el plan. La vía no resulta muy bonita debido a la discontinuidad de su
escalada y la calidad de la roca. De modo que con tantas opciones a nuestro alrededor,
acordamos no perder tiempo y encaminarnos hacia la Torre sin Nombre. Nuestro objetivo era intentar la mítica Eternal Flame. Desde mi punto de vista,
posiblemente sea una de las mejores rutas del mundo. La vía la escalamos en 12
horas disfrutando de cada largo al máximo y, desde su cumbre, contemplamos una
espectacular vista de 360 grados de toda la cordillera del Karakorum.
Tras unos días de descanso y mal clima, decidimos
dar un pegue express. A pesar de que
el parte meteorológico no era el mejor, salimos al medio día del campo base con
la intención de escalar la Pequeña Trango
por su cara este. Nos llevamos una gran sorpresa cuando empezamos la ruta, ya
que resulta muy aérea y estética y con largos de calidad. La vía la completamos
en un par de horas y el premio final fue llegar a su diminuta y expuesta cima
donde disfrutamos de un hermoso atardecer. Al anochecer, hicimos los rápeles
necesarios y establecimos nuestro campamento alto, para al día siguiente partir
hacia la Gran Trango por la ruta
Americana. A las 5 a.m. salimos y, sin muchas dificultades, llegamos a su
cumbre por la mañana temprano, pudiendo disfrutar de un increíble amanecer.
Las baterías ya estaban llegando a su fin
y los días de expedición también. Lo único que nos faltaba por hacer para
cerrar con broche de oro la expedición, era abrir una ruta nueva, de modo que
eso fue lo que hicimos. Teníamos los ojos puestos desde el primer día que
llegamos en una pared del Haina Brack,
la cual se encuentra frente a las Tango, a tan solo 30 minutos del campo base.
Escogimos la línea más directa que encontramos y nos aventuramos en un mar de
roca de 700 metros de altura. Tardamos tres días en alcanzar su cumbre debido a
la cantidad de artificial que tuvimos que hacer a causa de la presencia de
vegetación en las fisuras. Entre descansos y más días de trabajo, decidimos
dejar la ruta totalmente limpia y equipada para un pegue en libre y futuros
intentos. Esta línea bautizada como FreeTanga
Ecuatoriana (7b+ A1+, 680m) puede ser considerada 5 estrellas por varias
razones. La escalada es increíble con varios largos de off with, la roca muy compacta, bien protegida y sin duda alguna es
una gran opción para aclimatar, entrar en calor e ir a apretar cerca del campo
base.
Actualmente,
estamos embarcados en un gran proyecto que lo denominamos 7 Continentes - 14
Paredes, que consiste en escalar las dos paredes más representativas de
cada Continente. Por el momento, ya hemos escalado cinco de ellas: Fitz Roy
(Patagonia), La Esfinge (Perú), El Capitán (EEUU), La Torre
sin Nombre (Pakistán) y El Naranjo de Bulnes (España). Para poder
continuar con este proyecto, contamos ya con el respaldo de algunas marcas como
Mammut, Finalin, PETZL, Explorer, Municipio de Quito, Natura-Nestle,
Afuera Producciones, Superior, Greco,
Strong Sports Nutrition, Faiquito y Godard Catering Group, pero seguimos
buscando apoyo para completar nuestro objetivo. Gracias a esta última
expedición, nos hemos convertido en los primeros sudamericanos en conquistar
las Torres del Trango.
Empezando la Eternla Flame
Buriliando la R10 de FreeTanga Ecuatoriana
Primeros largos de la Eternal Flame